Siguiendo la pista de tus ídolos

¿Quién no quiere sentarse en la misma silla donde Hemingway se inspiró para escribir “El viejo y el mar”, o sentir el olor y la acústica del bar más representativo en la historia de Los Beatles? Por suerte, muchos de estos lugares todavía existen y pueden ser visitados por todo aquel que quiera pisar el mismo suelo que sus ídolos. Para algunos fueron fuente de inspiración, para otros simplemente un refugio y para muchos otros un lugar de encuentro con amigos. Lo cierto es que hoy estos lugares se convirtieron en objeto de peregrinaje por parte de fanáticos, cholulos y amantes de la cultura.

Sin duda, el bar argentino más emblemático es el Café Tortoni, ubicado sobre la histórica Avenida de Mayo, que ha recibido desde 1858 a personajes como Carlos Gardel, Jorge Luis Borges, Alfonsina Storni y el gran artista Benito Quinquela Martín, entre otros. Sus mesas, sillones y su estilo particular permitieron que este lugar icónico de la ciudad de Buenos Aires fuera el preferido de artistas, filósofos, escritores y bohemios locales. Hoy en día varios murales recuerdan a sus visitantes ilustres.

Otro bar, pero con mayor fama internacional es El Floridita, ubicado en el corazón de La Habana (Cuba). Este histórico local se jacta de ser el precursor de los daiquiris helados, que fueron inmortalizados en varias de las obras de su más famoso habitué: Ernest Hemingway. El escritor pasaba horas en él y, a modo de homenaje y recuerdo, hay una estatua suya en su lugar favorito del bar. Personajes de fama internacional y miles de turistas visitan este rincón icónico de Cuba, donde se respira olor a Caribe y a la mejor literatura.

La historia del siglo XX no hubiese sido la misma sin Los Beatles y, dicen los que entienden de música, ellos no hubieran sido los mismos sin The Cavern. Este pub ubicado en Londres saltó a la fama luego de que la legendaria banda británica diera sus primeros pasos dentro de sus paredes. Entre 1961 y 1962 Los Beatles tocaron casi 300 veces en su particular escenario. En los años siguientes decenas de bandas famosas como The Rolling Stones, The Yardbirds, The Kinks, Elton John, The Who y John Lee Hooker tocaron en el famoso club, sitio obligado para cualquier fanático del rock.

En 1863 abrió sus puertas el café del Grand Hotel de la Paix en París y desde ese momento se convirtió en un punto importante de la maravillosa capital francesa. Desde siempre, compositores y escritores como Massenet, Zola y Maupassant fueron visitantes usuales. Ya en el siglo XX, Orson Wells y Salvador Dalí lo eligieron para pasar varias horas diarias. Esta esquina famosa mundialmente refleja en elegante estilo francés y es un clásico que aún no pasa de moda en la ciudad de la luz.

En Nueva York, el White Horse Tavern es un punto icónico de Greenwich Village. Fue fundado en 1880 pero se hizo famoso gracias al escritor Dylan Thomas y sus amigos escritores que lo frecuentaron desde la década del 50. Otros famosos que eran visitantes habituales fueron: Bob Dylan, Jim Morrison y Norman Mailer.

El Harry’s New York Bar de París también se volvió un sitio importante, gracias a ser el elegido de personalidades americanas que residían en la capital francesa. Era frecuentado por escritores como Sinclair Lewis o Ernest Hemingway y personalidades admiradas como Coco Chanel, Rita Hayworth y Humphrey Bogart. Por otro lado, este bar también es famoso por haber sido el lugar donde se inventó el trago “Bloody Mary” y por ser mencionado en la novela “American Psycho”, de Bret Easton Ellis.

Muchos de estos lugares cuentan mejor la historia reciente que otros monumentos o los propios libros de historia. Justamente por eso es imprescindible visitarlos. ¿Cuáles otros agregarías a la lista?