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17 de noviembre de 2014
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Magdeburgo, la ciudad del acueducto navegable

Es la principal ciudad de la región centro oriental de Alemania. Tiene una interesante mixtura entre la arquitectura antigua y moderna, en la que se destaca el Magdebur Water Bridge.
Magdeburgo, la ciudad del acueducto navegable
El acueducto sobre el río Elba es el más importante de Alemania.

Por Verónica Luna
El corazón de Alemania alberga sentimientos profundos. Sus raíces se hunden muy hondamente en la historia y fluyen en un presente y un futuro no menos intenso. En esa conexión hacia atrás se encuentra su identidad como ciudad imperial y fortaleza, su trayectoria como ave fénix que debe resurgir cada vez desde sus escombros. Por su ubicación se convirtió en un blanco vulnerable. De cada reconstrucción quedaron huellas en su arquitectura.Catedral de Magdeburgo
A orillas del río Elba, al sur de Berlín, la ciudad de Magdeburgo fue sede del Sacro Imperio Romano Germánico, se vio afectada por la Guerra de los Treinta Años, y la Guerra Fría. De las entrañas de su territorio Martín Lutero expandió su reforma protestante que generó cambios en la iglesia. Pero no es solo eso. Su rico patrimonio cuenta también con otros hitos históricos vinculados al desarrollo científico-técnico entre los que se cuentan el descubrimiento de un procedimiento de fundición dura, el primer vuelo motorizado y ensayos para vuelos espaciales.
Entre las obras más relevantes de su arquitectura se encuentran la Catedral cuyas torres góticas son como faros que guían a los visitantes en la ciudad. Es uno de los emblemas de la ciudad por ser la primera de ese estilo erigida en el suelo alemán. La presencia de los edificios religiosos es importante no sólo por sus características arquitectónicas sino por formar parte de la Ruta del Romanticismo Alemán que se desarrolla uniendo iglesias, monasterios y antiguos castillos en la zona de los ríos Elba y Havel.
En cuanto a las características edilicias también se destaca la Ciudadela Verde, obra del arquitecto Friedensreich Hundertwasser, y los museos de Historia Natural, el de Arte y el de Historia. En este último se encuentra la escultura ecuestre esculpida en el siglo XIII que representa al emperador Otón I, verdadero símbolo de la ciudad. Hay teatros y galerías que complementan la oferta cultural. En verano se desarrollan espectáculos musicales en los espacios públicos que expanden notas musicales a través del ambiente.
En las salas de un antiguo convento funciona el centro de exposiciones de arte contemporáneo. El edificio es una joya arquitectónica que data de los siglos XI-XII. El sitio cuenta además con una biblioteca con más de 22 mil tomos, especializados en teología y filología.Catedral Magdeburgo
Además de la fuerte impronta cultural que predomina en el ámbito urbano, un importante centro comercial es un polo de atracción para hacer compras y disfrutar de la gastronomía local. Bares, restaurantes y tabernas son sitios ideales para probar los más variados platos alemanes. Es en los alrededores de la plaza Hasselbachplatz que se realiza la fiesta de la música que consiste en que dos veces al año, se realizan al aire libre eventos con música que terminan en una fiesta callejera.
Entre los espacios más llamativos se encuentra el Elbauenpark, que es una obra paisajística creada con jardines temáticos, atracciones para niños, espacios deportivos, obras de arte y un lago. Tiene una torre de madera de 60 metros de altura, que la convierten en la más alta de Alemania, en la cual se puede recorrer la historia de la humanidad. Por sus espacios verdes, Magdeburgo ostenta el título de ser la segunda ciudad más verde de Alemania. Cuenta con circuitos para bicicletas y parques para disfrutar del aire libre.
En Magdeburgo late la historia de Alemania. El tiempo se articula en su entorno como las piezas de un rompecabezas que al juntarse adquieren sentido. Parte de los símbolos del paso del tiempo y la historia que conlleva, es el Magdeburg Water Bridge. Se trata de un largo acueducto que atraviesa el río Elba. Su longitud es casi tan amplia como su trayectoria a lo largo del tiempo. El proyecto de su construcción se inició a principios del siglo XX y se terminó de construir a fines de esa centuria.
El Magdeburg Water Bridge es un acueducto navegable de 918 metros, catalogado como el más largo del mundo. El proyecto se inició en 1905. En 1942 las obras se detuvieron a causa de la Segunda Guerra Mundial. La posterior Guerra Fría no fue un obstáculo menor y recién en 1997 se reinició la construcción. Se utilizaron 24 mil metros cúbicos de acero y 68 mil metros cúbicos de hormigón para que casi un siglo después, en 2003, el acueducto comenzara a funcionar.Río Elba
El acueducto es una importante vía de comunicación que se suma a las autopistas y red ferroviaria que conectan a la ciudad con el resto del país y Europa. Esta obra de infraestructura permite conectar el canal Elba-Havel al Canal Central. Antes de la existencia de esta vía, los barcos tenían que hacer un rodeo de 12 kilómetros.
La moderna construcción, además de ser una vía de conexión con los puertos a través del Rhin, es un atractivo en sí mismo, al punto que diariamente los turistas que visitan la ciudad la incluyen en sus recorridos.
Magdeburgo es un corazón que late. Con la fuerza de sus impulsos atrae a los espectadores de su historia, sus piezas arquitectónicas, su cultura, sus bellezas. Tiene energías renovadas que surgen de sus propias cenizas y que la llevan a empujar con fuerza hacia el futuro y la modernidad.
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Fotos: www.everystockphoto.com

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