Animales exóticos del globo terráqueo, un paseo diferente por el mundo

Por Guadalupe Araoz
Cuando viajamos nos llaman la atención los paisajes y las culturas que vemos pero también los animales con sus formas, sonidos y colores diferentes a los que conocemos. Algunos nos resultan familiares como los gatos malayos que tienen rabo corto en vez de la cola larga que presentan en occidente; mientras que otras especies parecen sacadas enteramente de un cuento fantástico.
En  Centro y Sudamérica encontramos los folívoros, también conocidos como perezosos. Son animales neo tropicales de movimientos lentos, pelaje liso y sedoso y contextura parecida a la de un pequeño primate aunque se encuentran aparentados con los osos hormigueros. De carácter tranquilo, se los puede acariciar en algunas plazas de Bolivia mientras comienzan el lento ascenso al árbol que les servirá de alimento. En el mismo continente, al norte de Argentina, los coatíes invaden el complejo de las Cataratas del Iguazú en busca de comida. Este pequeño omnívoro de nariz alargada que no llega a medir 1.40 metros, se escabulle fácilmente entre los árboles. También habitan la zona de Arizona en Estados Unidos, siendo una excepción a su preferencia por climas tropicales.
Asia, por otro lado, es el hogar del panda rojo. En peligro de extinción, existe una población aproximada de 2.500 pandas rojos distribuidos en el Himalaya, Bután, China, India, Laos, Nepal y Birmania. La fotografía tomada por Marta Diarra muestra la belleza del antifaz de su cara que recuerda la del mapache. El pato mandarín, también se encuentra en Asia. Oriundo de China, Japón y Siberia, es comúnmente utilizado en parques debido a sus vivos colores que se pueden apreciar en la imagen de Jose Luis Cernadas Iglesias. El macho presenta un aspecto irreal con su copete rojo con brillos metálicos, el verde sobre su frente, las plumas cobrizas, el pecho morado y las azuladas franjas laterales.
Un poco más al sur, en una de las islas de Indonesia, se encuentra el temerario dragón de Komodo: el lagarto de mayor tamaño del mundo. Con una longitud máxima de tres metros y un peso que puede alcanzar los 140 kilos, esta especie posee un sofisticado veneno que produce en la presa un shock a través de una severa pérdida de sangre causada por un agente anticoagulante. La imagen tomada por Adhi Rachdian nos transmite lo intimidantes que son pero no llega a mostrar su destreza al caminar que los torna aún más amenazadores.
El aye-aye, oriundo de Madagascar, es un animal tanto extraño como estrafalario. Emparentado con los lémures y con tan solo 2.500 ejemplares en el mundo, su existencia se halla en peligro a causa de los supersticiosos lugareños. Según la cultura popular, si un aye-aye apunta a un individuo con su dedo intermedio ésta morirá súbitamente. Más allá de los mitos, estos animales inofensivos, como el de la fotografía de Frank Vassen, se alimentan de insectos que encuentran golpeando rítmicamente la corteza de los árboles.
África también es el hogar del okapi, un mamífero pariente de la jirafa y tan maravilloso como ella en cuanto a sus formas y pelaje. Con su manto rojizo, patas y glúteos que recuerdan a una cebra, sus dos pequeños cuernos, su estatura máxima de 1,80 metros y su negra lengua que le permite limpiarse las orejas, es el animal con forma de caballo más fantástico que uno pudiera imaginar. Eric Kilby lo retrató en su hábitat natural, enlas tupidas selvas del norte del Congo. También se encuentra en el continente el turacoque se caracteriza por su pelaje de color intenso y un penacho que cortael aire a su paso. En la fotografía tomada por Vince Smith aparece un turaco azul intenso pero también se encuentran de colores verdes, rojos penetrantes y azules oscuros. Son territoriales y agresivos incluso con las hembras que son continuamente atacadas por los machos.
Australia, por otro lado, no se queda atrás en cuanto a animales exóticos. El moloch, pequeño lagarto con forma de diablillo espinoso, es el único capaz de beber a través de su piel cuando llueve o cuando hay humedad en el ambiente. Con sus 20 centímetros de largo, también es capaz de cambiar de color para camuflarse. Su aspecto, expuesto en la imagen de Steve Shattuck, nos llevaría a pensar que se trata de un animal altamente venenoso pero es completamente inofensivo. En el mismo país se encuentra el lagarto con chorreasretratado por Maritime Aquarium at Norwalk. También nativo delsur de Nueva Guinea, se caracteriza por la porción de piel con largas espinas de cartílago detrás de su cabeza que abren cuando se siente amenazado. Otro animal con un aspecto muy particular, endémico de Nueva Guinea, es el NyctimenePapuanus o murciélago Yoda, por el parecido que tiene con el personaje de la Guerra de las Galaxias. Esta especie de doradas orejas, fue descubierta recién en 2009 gracias a una expedición de científicos americanos y dada a conocer en 2010. Con un tamaño mediano de 40 centímetros de altura, cuando abre sus alas puede llegar hasta una envergadura de 1,5 metros.
El Océano Ártico cobija animales increíbles como el Narval, captado por el lente de Glenn Williams. Este mamífero acuático de color gris puede medir hasta 5 metros. El macho se caracteriza por poseer dos colmillos, de los cuales el izquierdo crece de forma excesiva hasta formar un cuerno retorcido de tres metros de largo. El propósito de su cuerno continúa siendo objeto de debate. Según el equipo del investigador Martin T. Nweeia se trata de un órgano sensorial capaz de detectar cambios de temperatura, presión y el grado de salinidad del agua. En la antigüedad se creía que el colmillo del narval guardaba relación con el cuerno del unicornio por lo que era utilizado con fines mágicos. Hoy en día se encuentran en peligro de extinción, con una población aproximada de 40.000 individuos.
En cambio, en los océanos Índico y Pacífico se encuentra el dugongo que se muestra en la imagen de Christian Haugen. Con sus 3 metros y una figura similar a la del manatí, solo puede pasar 15 minutos sumergido entre inmersiones y nunca va más allá de los 10 metros de profundidad. Suele alimentarse de algas por las noches en zonas bajas donde corren peligro de ser atrapados por las hélices de los barcos, las redes de arrastre y por aquellos que los apresan para vender su carne y su grasa en el mercado negro. En Australia, la población de dugongos aumentó gracias a la protección gubernamental del país y a una implementación eficaz.
La última especie de la que hablaremos es el tapir, que habita en regiones selváticas húmedas y en los páramos andinos. Este género de mamíferos se encuentra emparentado con los rinocerontes, con los que comparte el cuerpo robusto. Se trata de animales primitivos cuyos primeros representantes vivieron en el Eoceno de Eurasia, hace 55 millones de años. Su principal peculiaridad es el hocico alargado que utilizan para recolectar hojas, hierbas y raíces, principalmente en los pantanos. La fotografía de Eric Kilby muestra una cría de tapir con su característico pelaje pardo con manchas que se difuminan con la edad tornándose oscuro.
Estos son algunos ejemplos de animales exóticos de diferentes continentes y océanos. El mundo es rico en diversidad y basta con indagar en internet para encontrar otros tan bellos y extraordinarios como los que les presentamos en este artículo. Los invitamos a explorar la variada fauna de nuestro planeta y compartir con nosotros otras especies.