Travesías exóticas por el mundo

Por Verónica Luna
Algunos destinos del mundo son bien tradicionales, y otros tienen particularidades que le suman un plus de atractivo para los que prefieren la aventura.
La búsqueda de innovación en materia turística motiva la diversificación de la oferta tanto de viajes como de excursiones. La curiosidad, la adrenalina, los desafíos, son condimentos que incitan a buscar nuevos destinos y disfrutar a pleno de las travesías exóticas.
Un periplo poco convencional puede desarrollarse sin dudas en Noruega. Recorrer sus fiordos y archipiélagos a través de expediciones que demandan varios días, llevan a conocer algunos de los aspectos más llamativos e inexplorados del norte europeo.
El archipiélago de Svalbard es uno de los más codiciados ya que se encuentra en el Océano Glaciar Ártico, y es uno de los territorios más habitados por osos polares. Estas tierras remotas, que fueron zona de conquista de mineros y balleneros, son un cúmulo de misterios que motivan a ser descubiertas. Las travesías se realizan de diferentes maneras, trekking, kayak, esquí, a través de trineos impulsados por perros, o la combinación de todas ellas.
Tromso es otro de los puntos en los cuales se concentran las travesías para explorar las tierras heladas de Noruega. Era la capital del Ártico, alberga una pequeña población y es la región en donde se encuentra la universidad situada más al norte del planeta. Recorrer esta zona en trineo tirado por perros permite una experiencia singular, además del avistaje de fauna y la observación de fenómenos tan espectaculares y llamativos como las auroras boreales. En la expedición se atraviesan ríos helados, planicies, glaciares y bosques nevados. Las montañas, los fiordos, los acantilados, las bahías, conforman un paisaje espectacular que corona el sol de medianoche. Internarse en esa geografía tan rica y abundante es una experiencia inolvidable que está llena de sorpresas y aventuras.
Zimbabwe, en África, es todo un destino exótico. Las travesías en 4x4 llevan a contemplar fauna y paisajes realmente impresionantes. Selvas tropicales, sabanas, ríos, montañas, lagos, son algunos de los rasgos geográficos que pueden recorrerse en expediciones por uno de los países más llamativos del continente negro. Tiene espacios naturales como el Parque Nacional Mana Pools, el Matobo y el Parque Nacional de Hwange (el más grande del país y donde puede encontrarse una importante población de elefantes). Entre los sitios más visitados, sin embargo, se encuentran las Cataratas Victoria, en la frontera con Zambia, que pueden ser recorridas por aire o a través de un paseo por el río Zambeze.
El Desierto de Gobi (Mongolia) es otro de los rincones del planeta donde iniciar una travesía inusitada. La recorrida a lomo de camello lleva varios días. Se trajina durante el día y luego, el pernocte es en campamentos nómades. La experiencia no sólo lleva a la vivencia paisajística del desierto sino también a conocer y comprender la cultura de los pastores que habitan esas superficies arenosas. La expedición también muestra la vida en los oasis. Se visitan el Parque Nacional Gurvan Shaikhan y yacimientos fósiles.
El Monte Hua Shuan, en China, ofrece un gran desafío. Es una de las montañas sagradas del taoísmo, ubicada en Huayin, en la provincia de Shaanxi, a 120 kilómetros al este de Xi ´An, lugar muy conocido por albergar al Ejército Terracota. Este lugar, está considerado una de las rutas de senderismo más peligrosas del mundo. Y es, sin duda, un lugar bien exótico para conocer. Se trata de una montaña cuyo ascenso propone recorrer una serie de escalones tallados en la piedra que conducen a un camino realizado con tablones de madera a una altura que deja sin aliento. Al final del camino, un te espera para reconfortar a los expedicionarios en un templo taoísta.
Para los monjes, la subida hasta la cima de la montaña es un ritual de suma importancia. La percepción del amanecer desde el punto más alto representa la renovación y el renacimiento. Para los turistas, es un lugar de impresionante desafío. Cada año, más de un millón de turistas visitan el lugar, sobre todo en temporada alta entre marzo y octubre.
El desafío es realmente estremecedor. Subir la montaña requiere de mucha destreza y experiencia y aun así, el riesgo está asegurado. El ascenso demanda unas 10 horas. Son unos 15 kilómetros de recorrido. El espacio para movilizarse es de apenas 30 centímetros de ancho construidos sobre tablones desvencijados al borde del precipicio. También hay escalones que se suceden dispuestos en un ángulo de 90 grados.
Hay dos formas de ascender el monte. Son dos rutas muy antiguas, una fue construida entre los siglos III y IV d.C. La otra cuenta con un teleférico. Para quienes no se animan a concluir la travesía a pie, ese medio de transporte es una solución, pero no evita el vértigo y la adrenalina que se vive a gran altura.
Entre los destinos que ameritan ser explorados en travesías que son verdaderamente exóticas se encuentran Indonesia, Filipinas, Costa Rica y Hawaii. Hay muchos otros. El mundo es un lugar gigante, sólo es cuestión de descubrirlo.
¿Alguna vez visitaste alguno de estos exóticos destinos? Compartí aquí tu experiencia.
Fotos: Pixabay