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02 de junio de 2017
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Paraíso nórdico

Considerados uno de los espectáculos naturales más bellos del mundo, los fiordos de Noruega envuelven a sus visitantes con un paisaje imponente que invita a la aventura.
Paraíso nórdico
La belleza de los paisajes deja sin aliento a quienes visitan los fiordos. Foto: Johan Berge/Innovation Norway.

La naturaleza impacta y golpea fuerte las retinas de los turistas que visitan los ancestrales fiordos de Noruega. Este fenómeno natural, característico de los países nórdicos, es el resultado del avance de glaciares que avanzaron hacia el mar y, al derretirse, permitieron que el agua salada penetrara en los profundos canales socavados por el hielo. Bordeados por montañas empinadas y cubiertas de vegetación frondosa, son un espectáculo soñado para cualquier aventurero y amante del aire libre.

Fiordos de Noruega. Foto: Anders Gjengedal/Innovation Norway. (clickear en la imagen para agrandar)Nombrados por la UNESCO como Patrimonio de la Humanidad, al igual que las Pirámides de Egipto, las Cataratas de Victoria, la Muralla China y el Gran Cañón, los fiordos noruegos fueron seleccionados por la revista National Geographic Traveler como la atracción turística natural más “top” en el mundo.

Polo de turismo del país desde la llegada de los primeros visitantes en 1869, esta zona provee a los visitantes de muchas atracciones como sus altísimas montañas y glaciares azules, parques nacionales, imponentes cataratas de deshielo y aguas claras donde se puede nadar, bucear y pescar.

Fiordos de Noruega: Hardanger. Foto: Gaby Bohle/Innovation Norway. (clickear en la imagen para agrandar)Ciudad de Bergen, punto de partida

Bergen es la puerta de entrada a la zona de los fiordos. Esta ciudad, la segunda más grande de Noruega, ofrece una gran variedad de entretenimientos, paseos y emocionantes recorridos por paisajes privilegiados. Entre ellos se encuentra el Mercado del Pescado, donde puede encontrarse un envidiable abanico de especies marinas, bacalao, langostas y los más extraños caviares, que tientan tanto a los viajeros como a los nativos.

Las fiestas y los eventos autóctonos son grandes atractivos para quienes quieren sumergirse en la rica cultura local, que cuenta con una compañía profesional de ballet y una vigorosa vida musical con unos de los mejores coros del país. Como plus, una gran colección de pinturas de Edward Munch puede ser admirada en el auditorio Grieghallen, entre otras galerías de arte que completan la oferta artística.

Para los amantes de la arquitectura, las casas del lugar, íntegramente realizadas en madera y ubicadas en pintorescas callecitas de adoquines, le dan un estilo muy propio y único a una de las ciudades mejor conservadas de Europa.

Fiordos de Noruega: Lofthus. Foto: Per Eide/Innovation Norway. (clickear en la imagen para agrandar)Fiordo de Sogne (Sognefjord)

Tiene 204 km de extensión y 1300 metros de profundidad, por eso el Fiordo de Sogne es el más grande y más visitado del mundo, ya que en él confluyen grandes glaciares y los grandes picos montañosos de la zona.

Sognefjord se divide en varios brazos, cada uno de los que forma un fiordo distinto y con características propias. Uno de los más famosos que se desprenden de él es el Norgefjord, que se caracteriza por ser el más angosto de la zona y estar ubicado entre montañas de más de 2000 metros, creando una imagen imposible de reproducir.

Otro de los brazos es el Finnafjord, que conforma la rama más pequeña y hermosa del Sognefjord. La única manera de acceder allí es por medio de recorridos en bote, donde se pueden ver cómo las aguas de deshielo alimentan al fiordo. En los últimos años muchas familias se han asentado allí para realizar tareas de agricultura y vivir una vida lejos de todo.

Fiordos de Noruega: Sognefjord. Foto: Christian Houge/Innovation Norway. (clickear en la imagen para agrandar)El Lusterfjord, que linda con las montañas Jotunheimen, glaciares y el parque nacional Jostedalsbreen, sirvió de inspiración para varios artistas debido al único escenario en el que se encuentra inserto. El agua tiene un color verde intenso debido a que proviene de los deshielos y en sus orillas se encuentran pequeñas ciudades compuestas de granjas en las que se cultivan fresas y frutillas. Hace algunos años se llegaba al Fiordo de Luster a través de botes que salían de la ciudad de Bergen varias veces por semana. Hoy en día, en cambio, hay rutas por las que se puede llegar desde las ciudades más cercanas.

Más información:
» www.sognefjord.no
» www.visitnorway.com
» www.fjordnorway.com

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