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19 de julio de 2013
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Safaris de lujo en África

¿Alguna vez se imaginaron estar descansando en una piscina al aire libre, con un vaso de buen vino en la mano mientras a pocos metros de allí varios elefantes beben agua de un arroyo y una jirafa arranca hojas verdes de los árboles? Esta escena y muchas más son posibles en los safaris de lujo que ofrecen los países del sur de África.
Safaris de lujo en África
Lujo y Relax

Por Aldana Chiodi
África es sinónimo de naturaleza y de safaris. África es sinónimo de aventura. Cuando pensamos en África, casi inevitablemente nos vienen a la mente los animales y, entre ellos, los llamados “big five” (cinco grandes), que son el hipopótamo, el león, el leopardo, el rinoceronte y el búfalo. Al visitar los países africanos tenemos entre nuestros objetivos poder apreciar de cerca el comportamiento de estos cinco grandes.
Como en casi todos los destinos, existen muchas maneras de acercarnos y conocer lo que el destino tiene para ofrecernos. En el caso de los safaris, muchas personas deciden alquilar una camioneta 4 x 4 y emprender el viaje de aventura solos por los Parques Nacionales preparados para ello. Son parques que cuentan con áreas de camping, proveedurías y espacios para los vehículos. Otras personas prefieren contratar las excursiones diarias de safaris y pasar la noche en las ciudades más cercanas o en los servicios de lodges de 2 y 3 estrellas que suelen ofrecer muchos parques. Pero también están los viajeros que prefieren tener una experiencia diferente en este pedacito del mundo que es África. Para ellos, existen los safaris de lujo de dos, tres o cuatro días. Casi todos los países de África del Sur, junto con algunos de África Central, como Kenia y Tanzania, ofrecen este tipo de servicio. Algunos de ellos, como Botswana, se especializan en los mismos, ya que como sus propias autoridades de turismo dicen “quieren poner todos sus esfuerzos en el turismo de lujo”.
Los safaris de lujo incluyen lodges en el medio de la selva o de la sabana, con todas las comodidades y el servicio de un hotel 5 estrellas. A algunos de ellos solo es posible llegar en helicópteros privados y esto es algo que contribuye con la exclusividad y el lujo del lugar y los servicios. Muchos de ellos, además, incluyen servicios de spa, como masajes y baños termales.
Las habitaciones suelen ser hermosas cabañas (tanto de tela dura como de madera), con aire acondicionado, jacuzzi, luces tenues y, en algunos casos, amplios ventanales. El servicio y la amabilidad de las personas locales hacen que la experiencia sea más encantadora aún. Por momentos, uno no sabe dónde está. Todo parece idílico: el clima, el paisaje, la comida, los vinos, la posibilidad de ver tan de cerca la vida los animales, las noches estrelladas, las conversaciones y el lento paso del tiempo.
Si bien cada país, parque y lodge tienen servicios particulares, en general todos cumplen con la misma rutina. Cuando uno llega a estos lodges es recibido por el encargado del campamento quien nos ofrece alguna bebida mientras nos invita a conocer las instalaciones y nos explica las normas básicas de seguridad. Una de las principales es que no podemos caminar solos por el campamento, ya que estamos en África y los animales están sueltos. Por eso, y si la habitación no está dentro de un complejo más grande, a primera hora de la mañana, antes del amanecer, vendrá por nosotros un guía quién nos acompañará hasta el comedor o cabaña principal para disfrutar de un abundante y nutritivo desayuno. Una vez que estemos con el estómago lleno es hora de llenar de alegría nuestros corazones y partir hacia el primer safari de la mañana. Los conductores de los vehículos conocen el terreno a la perfección y saben cuáles son los movimientos de los animales. Siguiendo las huellas y su instinto nos llevarán al lugar exacto donde, si tenemos suerte, veremos a un león descansando o a un leopardo comiendo un elefante muerto: la naturaleza en su estado más puro. Al regresar al campamento, la sonrisa de los locales nos llenará de alegría y agradeceremos la toalla húmeda con la que nos reciben para sacarnos el polvo de las manos y la cara. Luego de un breve descanso estará listo el almuerzo: abundante, riquísimo y gourmet, con entrada, plato principal, postre y el vino o bebida a elección. Desde que finaliza el almuerzo hasta las 15 aproximadamente es la hora del descanso. El calor suele hacerse sentir fuerte en esta franja horaria, así que mientras algunos deciden recostarse bajo el aire acondicionado otros prefieren descansar, leer, tomar alguna bebida fría u hojear una revista en el living o sala de estar acompañados por una suave brisa y a la espera de ver pasar algún animal cerca. Si el lodge está junto a algún arroyo o curso de agua es común observar a los animales bebiendo agua a toda hora y disfrutar en vivo y en directo de un gran espectáculo. Luego del merecido descanso, llega la hora de la merienda, donde podemos elegir alguna bebida caliente o fría junto a tortas, muffins o pan casero. A eso de las 16 sale el segundo safari del día con el objetivo de seguir disfrutando de la naturaleza en su estado más puro y de apreciar los imponente atardeceres africanos en los que, como decía el periodista polaco Kapuscinski, el sol parece derrumbarse en segundos.
Al regresar, un buen baño nos hará estar listos para la cena gourmet bajo las luces tenues de las velas, el sonido de los animales nocturnos y el cielo estrellados africano. Habrá sido el final de un día soñado, con el corazón feliz y ansioso por ver lo que nos deparará la naturaleza en los próximos días. Una experiencia única que todos deberíamos tener alguna vez en la vida.
Algunos links para más información
Botswana http://www.sklcamps.com/
Sudáfrica http://www.kuzukolodge.co.za/   http://www.grootbos.com/en/home
Varios países http://es.wilderness-safaris.com/  (campamentos clásicos y premier)

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