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07 de diciembre de 2015

Bogotá, la reina de Colombia

Multifacética, la capital colombiana es rica en opciones. Su patrimonio cultural, la atmósfera colonial que la envuelve, el turismo de compras y el de negocios, son motivos más que suficientes para conocerla.

Verónica Luna
Es la ciudad capital de Colombia, un país que logró reconvertirse al turismo y atraer a visitantes de diferentes latitudes. Epicentro de negocios, reuniones y convenciones, es también un gran imán para los turistas que buscan sorprenderse con su historia, su cultura y su naturaleza. Su abanico de 77 museos, 70 galerías de arte, numerosos teatros, múltiples espacios para conciertos musicales y edificios de valor patrimonial arquitectónico, la convierten en un atractivo cultural destacado de Latinoamérica.
Una parte de la ciudad se muestra moderna y pujante, mientras que en su otra faceta, las construcciones coloniales con la impronta de su historia conmueven con ese pasado que aún persiste en sus fachadas y que generan un ambiente nostálgico y hermoso.
La Candelaria es el área de Bogotá donde se encuentran los edificios más emblemáticos e históricos. Calles de adoquines y antiguos caserones y quintas de estilo colonial.  La Casa de la Moneda, el Teatro Colón (sede de la Orquesta Filarmónica de Bogotá), el Observatorio Astronómico, la Quinta de Bolívar, el Eje Ambiental conocido como Paseo de la Avenida Jiménez de Quesada, son algunos de los sitios que hay que conocer si se visita la capital colombiana. El Colegio Mayor de San Bartolomé, fundado en 1604 por la Compañía de Jesús, es una reliquia en sí misma.
La Plaza Bolívar, rodeada por La Catedral Primada, el Capitolio Nacional, la Alcaldía, y varios museos, también están entre los recorridos habituales para cualquier turista que quiera llevarse algunas postales típicas. Si la idea es viajar a través del tiempo nada mejor que hacerlo en tranvía los fines de semana.
El Museo del Oro del Banco de la República podría decirse que es literalmente uno de los tesoros de Bogotá. El recinto, que se encuentra en el centro de la capital, exhibe una gran cantidad de piezas del metal más preciado. Son muestras de orfebrería de las diversas culturas prehispánicas. La colección está considerada Monumento Nacional y la más importante del mundo. Otro de los museos imperdibles es el dedicado a la obra del artista Fernando Botero. El Centro Cultural Gabriel García Márquez cuenta con una biblioteca con más de 80 mil libros, galería de arte y tiendas de discos y libros. La Biblioteca Virgilio Barco y el Museo Nacional son otros imperdibles.
La mejor vista de la ciudad se obtiene desde el Cerro de Monserrate, un pico de 3.152 metros en cuya cima se encuentra el Santuario homónimo, que contiene un Cristo del siglo XVII. El ascenso puede hacerse mediante una caminata de una hora y media, o elegir el camino más rápido que ofrece el funicular.
En el área conocida como zona T se encuentran calles peatonales  que están pobladas de bares, cafés, discotecas y restaurantes y donde se ubica una zona comercial de alta costura, y accesorios. En la zona G, en cambio, se encuentran restaurantes sofisticados. La gastronomía colombiana es una particular mezcla de tradiciones de las diversas etnias originarias con sabores derivados del aporte colonizador. La actividad nocturna también es abundante, especialmente con las discotecas que le ponen movimiento a las noches al ritmo de la rumba.
Para los fanáticos de las compras, hay más de 55 centros comerciales, espacios de comercialización de productos outlet, y producción de artículos artesanales realizados en madera, joyería, textil, entre otras variantes. El Mercado de Pulgas San Alejo es ideal para quienes buscan antigüedades y piezas de colección.
Una rica agenda de festivales y eventos multitudinarios complementa la inagotable oferta turística de Bogotá. El Festival Iberoamericano de Teatro, la Bienal de Artes, el Festival al Parque dedicado a diversos estilos musicales como el Jazz, el Rock y la Salsa, entre otros.
Los espacios verdes son numerosos. Se destacan el Nacional, el Metropolitano Simón Bolívar –que es el más grande-  y el de la Independencia, entre muchos otros y también el Jardín Botánico que permite conocer numerosas especies vegetales.
En las cercanías, uno de los sitios más visitados es la Catedral de Sal de Zipaquirá. Está ubicada en una mina de sal a 50 kilómetros de la capital y es un importante centro de peregrinaje.
Bogotá es una de las ciudades más altas de América Latina. Está emplazada a 2640 metros sobre el nivel del mar. Su temperatura varía entre los 6 y los 24ºC y las lluvias suelen ser frecuentes. Sobresale como destino ecoturístico. En sus alrededores se despliegan humedales como el de Santamaría y la Conejera que invitan a la práctica del ecoturismo y turismo naturaleza. Entre los parques naturales se destacan Chingaza, Chicaque y Entre Nubes.  También hay sitios ideales para la práctica parapente, escalada, bungee jumping,  kayak, entre otros deportes de aventuras.
Diversa y multifacética, Bogotá tiene atractivos para todos los gustos. Su impronta cultural e histórica es tan intensa que no hay otra manera de vivirla. Sus ritmos, sus sabores, su atmósfera conquistan el corazón de todos los que la visitan y la vuelven irresistible.
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Fotos: everystockphoto