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28 de mayo de 2012

Piedras preciosas, destinos de lujo

El mundo de la joyería despierta fascinación y encanto. Conocer sus principales destinos lleva a descubrir su riqueza mineral, turística y cultural. Buen viaje.
Por Verónica Luna Fantasías glamorosas se hacen realidad a través de un circuito que se inicia en la extracción de las piedras preciosas desde el corazón de las rocas, hasta las manos artesanales que tallan y dan brillo a gemas de distinto tamaño y valor. Luego, piezas únicas adornarán los escaparates más exclusivos en las principales ciudades  del mundo. Cuando el lujo no es vulgaridad, recorrer todo ese mundo es posible. Divino tesoro El brillo de los diamantes actúa como un faro que ilumina el camino que conduce a Botswana, Rusia, Sudáfrica, Canadá, sus principales productores. El interés por esta piedra data de varias centurias antes de la Era Cristiana. Hasta el siglo XVIII, India era prácticamente el único proveedor. Los diamantes llegaban a Amberes (Bélgica), estableciéndose un gran centro de comercio, con las piedras provenientes de Venecia vía Etiopía y Egipto, o a través de Arabia, Persia, Armenia y Turquía. En el siglo XVI, a partir del enfrentamiento con la corona británica, muchos de estos comerciantes migraron a Ámsterdam.   Piedra preciosa por excelencia, en la cotización de los diamantes influye la pureza, la talla, el color y el peso de las piezas.  Ámsterdam es uno de los centros de comercialización de diamantes tallados de mayor renombre internacional por su calidad. Es llamada “la ciudad del diamante”. Ostenta haber tallado las piedras de mayor tamaño, como el diamante Cullinan de 3000 quilates (unos 600 gramos), así como las más pequeñas, como el Koh-I-Noor, de 21 gramos y una larga historia que lo llevó a viajar de mano en mano hasta acabar en poder de la realeza británica. Estas y otras exquisitas joyas tienen su réplica en el Museo del Diamante, donde puede conocerse mucho acerca de los 400 años de historia que en materia de joyería tiene la ciudad. La exclusiva casa Gassan Diamonds, Coster y Amsterdam Diamond Center, son algunas de las joyerías que ofrecen tours guiados gratuitos por sus talleres.   Por la ruta alemana Cuando el deslumbrante mundo de las joyas se vuelve irresistible, Idar-Oberstein, en Alemania, es un paraíso de visita obligada. Más de 60 talleres, orfebres, delicada pedrería y un museo con una colección completa de minerales, conforman una auténtica fortuna escondida en "la capital alemana de las piedras preciosas". Allí se encuentra Steinkaulenberg, una de las mayores minas de ágatas de Europa, cuya visita guiada de una hora de duración, conduce a través de galerías a descubrir los secretos incrustados en los túneles. Parques recreativos al aire libre dan al turista la posibilidad de jugar a ser un buscador de tesoros y encontrar algunas piedras en estado natural. Si bien se destaca el trabajo con ágatas, también hay amatistas, cuarzos y cristales de roca, que a decir verdad, son piedras semi preciosas. Para ser consideradas preciosas, las piedras tienen que ser muy valiosas en función de su dureza, su escasez y sus colores.  Especialistas de todo el mundo -joyeros, orfebres, diseñadores, fabricantes de joyas- realizan su reunión cumbre en   la Feria Internacional de piedras preciosas y joyería que se lleva a cabo en este poblado, ubicado a 528 kms de Berlín. Pero no es la única muestra, Kostbar, la feria de exposición pública de joyas, es también un evento de gran convocatoria.   Verde que te quiero verde Colombia, además de tener bellísimas playas y ser un importante productor de café, es la tierra donde el verde fluye en su densa vegetación selvática, pero también del corazón de la tierra.  Importantes zonas de extracción de esmeraldas se encuentran próximas a Bogotá. A unos 300 Km  los municipios de San Pablo de Borbur o Boyacá proponen, además de conocer su esencia minera, un encuentro con la naturaleza, apreciar la flora y la fauna y encontrar especies como la mariposa azul, variedad única que se haya en peligro de extinción. La esmeralda está engarzada en la historia cultural de Colombia. Los grupos indígenas que habitaban el territorio 500 años antes de la era cristiana ya extraían estas piedras con técnicas rudimentarias. Eran consideradas símbolo de poder y riqueza y se utilizaban como ofrendas religiosas. En la actualidad, el país produce poco más del 50% de las esmeraldas de todo el mundo.  Exporta principalmente a Japón, Estados Unidos y Francia.   La Fundación Museo Internacional de la Esmeralda de Bogotá, exhibe más de tres mil piedras de color verde impetuoso sacadas de las minas de Coscuez, Muzo y Chivor. Un túnel permite observar las vetas de yacimientos geológicos. Se exponen piezas antiguas e importantes tallas. En Cartagena de Indias también hay un recinto destinado a la preservación del patrimonio geológico que identifica a Colombia. El Museo de la Esmeralda Colombiana realiza una tarea pedagógica acerca de la evolución del mineral desde su formación hasta terminar en un mostrador. Además de mostrar joyas, hay exposiciones de artesanías, fotografías y esculturas. Asimismo, se pueden visitar gran cantidad de joyerías y apreciar la variedad de alhajas que se producen en la ciudad.  Labios de rubí El rojo sangre del rubí impacta y seduce. Delicada maravilla que florece de la tierra, es la segunda piedra más dura después del diamante. La brújula que orienta su búsqueda lleva a los yacimientos de Myanmar, Tailandia, Sri Lanka y Tanzania. Allí se extraen también zafiros. Los de color azul intenso son de invaluable belleza, pero se encuentran principalmente en los depósitos de Nueva Gales del Sur. El principal proveedor de zafiros durante mucho tiempo fue la región de Cachemira, en la India, aunque actualmente esos reservorios parecen agotados.  Piezas de museo El camino hacia algunas de las piedras más excepcionales invita a visitar el Museo Británico de Historia Natural de Londres  donde se aloja el rubí Edward de 167 quilates y valiosas esmeraldas. En el Museo Americano de Historia Natural de New York se puede apreciar el rubí Estrella-long de 100 quilates, y el zafiro Estrella de la India, la mayor gema tallada y el zafiro negro Estrella de Medianoche. En el Smithsonian Institut de Washington, se encuentra el rubí Estrella de Reeves de 138 quilates, el zafiro Estrella de Asia, de 330 quilates y la esmeralda Gachalá, de 858 quilates.  En el viaje a través de la joyería virtual en la que se ha convertido imaginariamente el mundo, no se puede dejar de lado el Bazar Johari, uno de los principales mercados de Jaipur (India). Esencialmente es un bazar para el comercio de alhajas trabajadas con diamantes, esmeraldas, oro y plata.  Artesanías realizadas a mano abundan en este bullicioso espacio. Sin embargo, no todo lo que se ofrece puede resultar auténtico, además hay que prestar mucha atención a la variación de precios entre objetos similares.  Sí, tiene coronita Por su actividad portuaria, Gran Bretaña fue un importante centro de tráfico de joyas, piedras y metales preciosos.  Algunos locales se establecieron en puntos estratégicos de Londres como las  joyerías de Bond Street, así como los casi 300 establecimientos de  Hatton Garden. Para conocer algunas de las piezas más ilustres de la monarquía, entre las que destacan la tiara de la reina con un diamante de 105 quilates, el cetro de con una piedra preciosa de 530 quilates, y la corona del Imperio, adornada con 2.800 diamantes, la Torre de Londres, antigua residencia real, es el paseo indicado. En Birmingham, el Barrio de los Joyeros es un pintoresco centro turístico de donde proceden 40% de las joyas de Gran Bretaña. Cada año, entre los meses de noviembre y enero, el  distrito es la sede del festival de joyería contemporánea. Tiene un museo acondicionado en un viejo local donde se preserva la historia de la industria que forma parte del patrimonio del lugar.   El recorrido podría extenderse aún más. El circuito de las alhajas es inagotable. Si la Tierra fuera una gran joyería, un paseo por sus vitrinas transportaría hacia brillantes destinos. Cuando las piedras preciosas muestran su lugar en el mundo, el viaje se vuelve irresistible. ¿Alguna vez visitaste alguno de estos lugares u otros similares? Relátanos aquí tu experiencia.